Cuidar las fundas para que cuiden de ti
Lava con agua fría o templada, detergente suave y ciclo delicado. Evita suavizantes que afecten tratamientos antimanchas. Seca a la sombra para preservar color y fibras. Vuelve a colocar ligeramente húmeda para un ajuste impecable. ¿Tienes una pauta que te funcione siempre?
Cuidar las fundas para que cuiden de ti
Un pequeño desgarro se hace gigante si lo ignoras. Refuerza costuras con puntadas invisibles y usa parches interiores adhesivos para zonas de fricción. Guarda un kit básico cerca. Comparte tu truco favorito de costura exprés y ayuda a otros a prolongar su funda.